LO QUE OÍS EN LA ALCOBA, GRITADLO DESDE LA AZOTEA

COSAS OCULTAS.

Próximamente serán ya veintiún años los que marcan la permanencia de Jesucristo, junto a mi, día tras día. Dos décadas de permanencia contínua, durante las cuales, elegida por él como "su mensajera", como quien habrá de abrirle cauce para su Segunda Venida, y dar a conocer lo OMEGA, es decir: lo último que está realizando y transmitiendo con sus modos, sus avisos, su Palabra, debo dar testimonio de su Presencia y del modo cómo se le está recibiendo HOY por parte del pueblo y de los jefes de la Iglesia. 

Así que muchas serán las declaraciones que me cabe hacer, en este testimonio escrito.
Anticiparé, que el RECHAZO contumaz, ha sido la tónica. Y si hubiere de definir la sensación terrible que queda después de tanto esfuerzo, es la de que "nadie parece creer en Jesucristo". Esperarlo, pocos lo esperan, la Iglesia, no...
Como los romanos, han vuelto a encerrarlo dentro del sepulcro, olvidando su resurrección. Han olvidado también su martirio, su desgarradora agonía, su sufrimiento terrible...

Aquí haré un resumen de los avisos dados, y de quienes avisados, con poder para ejercerlo a favor de Jesucristo, han preferido ignorarlo. 

Por eso, este capítulo, entresacará "COSAS OCULTAS", que habiendo sucedido, y teniendo a Jesucristo como protagonista, siendo él mismo el emisor, sus sirvientes (sacerdotes, obispos, cardenales, Papas... laicos) han desestimado.

Será una recapitulación de algunas situaciones de lo habido, como un abreviado memorandum:


El sentimiento, Señor mío, de elevación de salir de aquí, experimentado por vez primera (lunes 20 de Nov. Del 95), me transformó por completo, haciéndome desear salir de mí y desentenderme (como desprendimiento) de las cosas todas, y aún personas de la tierra.  Repentinamente un afán por merecer lo que Tú puedes darnos y no lo que aquí podemos hallar...



         ...Eso, una semana antes, incluso un día antes, en que me hallaba en tribulaciones sobre seguirte, era impensable. Por eso afirmo que “ese cambio en mí, tal nacimiento nuevo, a nueva vida, solo ha estado producido por Ti”.

         Tú, una vez más has venido a mi encuentro. Tú me has vivificado. Bendito y alabado seas. Amén.
 
*
La reunión a que estaba convocada, se celebraría al día siguiente por la noche. Pues, bien, tomada la decisión, la noche anterior, sé que estuve muchas horas consultando con la almohada y en duermevela, mirando el mejor modo de hacérselo saber al cura, pues era hombre amable, grato, que siempre nos había tratado con cordialidad, y no me parecía debía darle cualquier excusa falsa, ni desaparecer sin más, en gesto de significativo desprecio. 

*
Yo llevaba tiempo pidiéndole a Dios, pues mi amor ya tan decidido así me lo manifestaba, fuerzas, fortaleza para propagarle, en este mundo tan mezquino y ateo. Le pedía apartase el miedo que me suponía enfrentarme a una sociedad incrédula, y al par le temía, pues me consideraba débil para darle, aunque ya lo estaba deseando.

*


Pero no convencida del todo, ya rehusaba proseguir. Al menos así lo decidí el día 19, y toda la noche la pasé tratando de encontrar razones que explicaran mi deserción. Encontré finalmente, hacia las tres o cuatro de la mañana, que solo podía haber un modo. Ser sincera y hablar al párroco, diciéndole que no me interesaba seguir.



         Parecí tranquilizarme y creo que dormí profundamente el resto de la noche. A la mañana siguiente, día de la reunión, me levanté de la cama con una sensación alegre y gozosa, que de modo inexplicable me hacía sentir necesaria mi asistencia...
...Sin saber por qué, sin que mediara pensamiento alguno, mi voluntad aparecía inclinada a acudir a las reuniones, con tal determinación y fuerza, que ya lo estaba deseando. No había miedo ninguno, ni temor a que de aquello se derivaran  responsabilidades o compromisos. Al contrario, me sentía henchida, embargada de alegría, con un gozo no anteriormente experimentado, que me hacía pensar en Dios, sólo en Dios; desear servirle, alabarle y bendecirle.

            Esta sensación duró todo el día. Era como si supiera que había encontrado algo valioso; como si tuviera un tesoro guardado.


Anduve todo el día, radiante de dicha y acudí a la reunión, sintiéndome fuerte y firme, cual nunca. Supe allí, que aquello no paraba en la mera preparación, sino que requería “apostolado auténtico”. Recordé la petición formulada tantas veces, en los últimos tiempos: “ Serte antorcha”...  Los caminos de Dios son extraños, pues en esa petición, yo pensaba en serlo a través de mis libros y escritos. Pero nada más lejos parecía ser la voluntad Divina. Él requería a la persona, no a la mente. Así he podido entenderlo.

*
Ese día, 21 de nov. Tuve mi primer brote de inquietud o ardentía ( el día 20, fue gozo, júbilo, fuego inexplicable; el 21, fue sólo fuego), en que parece que el alma se deshace, queriéndose salir del pecho.
Instintivamente se piensa en Dios. Se sienten ganas increíbles de bendecirle, de alabarle, de darle gracias. Dios se siente muy cerca en verdad.



A la hora de dormir, ya día 22, nada más meterme en la cama, hallándome bien despierta, y dándole gracias a Dios, por permitir que mi esposo se uniera al grupo, un nuevo estilo de vibración me acaparó, tal si una oleada sucesiva de expansiones del ánimo, le sacudiera o tratara de sacarlo fuera, con una rapidez o golpeteo tan grande, que aturdía en gran manera y entrañaba vorágine.

La mente alababa a Dios sin descanso, y los ojos cerrados se apretaban por efecto de esas sensaciones prodigiosas. La habitación estaba a oscuras.


...En esas, vi con absoluta claridad, tal si un flash disparara, e iluminara, al frente, una imagen de una mujer (busto solo) cubierta con un manto blanco, que mantenía la mirada baja, de perfil, a la izquierda, y antes de que esa imagen desapareciera, otro nuevo destello, puso ante mí, otra imagen de perfil, mirando a la derecha, más elevada que la otra, como en ángulo contrario, que mantenía la vista alzada. Era la misma imagen, con
¡distinta postura. En mi interior, una voz que yo no pronuncié, pero que era clara, decía: “ES LA VIRGEN MARÍA. ¡ESTÁS VIENDO A LA VIRGEN MARÍA!”.


*




El día 26 por la noche, tuve una visión que me dejó gran alborozo la noche entera, y que explico más adelante en otros cuadernos, pero quiero introducir aquí, en su orden cronológico. En aquel momento no estaba acostumbrada todavía a tales manifestaciones y no lograba entenderlas, por eso cuando sucedió no la recogí; si bien sabía eran cosa Tuya, por los gozos que en mí depositaba la noche entera y la fuerza con la que me estrechabas contigo.

“ Me veía frente a la costa, en una barca, con mi familia, ellos estaban distraídos, en sus cosas, como si un cristal los aislara de mi. Yo permanecía inquieta aguardando al que había de llegar, tú, el Señor. Sabía que en llegando, tenía que tomar una decisión importante.

En efecto llegaste hasta mi, desde el lado del horizonte, vestías con ropas al uso de nuestra época (me llamó la atención que usabas pantalón vaquero). Los míos no se daban cuenta de nada. Tendiste hacia mi tu mano, y esperabas que yo me decidera a dar el paso de irme contigo dejándolo todo. Yo sabía que ello era definitivo, que era como morir. Al elegirte, me desprendía de todo lo que había tenido hasta ese momento. Pero aunque permanecí unos minutos sopesándolo, finalmente te di la mano, y tú me abrazaste contigo, llevándome hasta el fondo del mar.

Sentí una como liberación, la sensación de haber llegado a una playa única de delicias, a la plenitud de todo conseguido. Tú ponías en mi tus gozos, tus embelesos, me arrebatabas en borrachera de vértigo inefable. Toda la noche me tuviste en ti, abrazada a tu Amor, sintiendo una gloria y una felicidad indescriptible, porque te había elegido. Duró ese goce la noche entera y todo el día siguiente. Flotaba, así lo sentía, en una nube de felicidad que no poseo palabras suficientes para transmitirla.

                                             *




He comprendido: que debo seguirte, hacerlo como quieres y me ordenas, serte fiel, no tener miedo a otros y no abandonarte. ¿Es eso?

         Sólo te pido, pues me oyes, lo sé, en estos torpes renglones, me prestes toda tu ayuda, y toda tu fortaleza. Mantén, oh Dios mío, encendido tu amor en mi corazón.

Requieres mi fidelidad. Me impulsas con vehemencia, sin que sepa el por qué del requerimiento... Me sacas de mi quehacer, con prisas, como a Samuel, en medio de la noche.

Es como si dijeras: “¡Despierta! ¡Despierta y ven tras de mí”.




Acudo rauda a tu llamada insistente, y te hallo –no sé cómo- reclamándome fidelidad. A pesar de los otros y de sus juicios; a pesar de persecuciones o tormentos... Exiges que me niegue ya del todo.

“Tú no obras –dices- quien obra soy Yo. Déjame hacer y no padezcas. Y en tanto sucede, calla, obedece, hazte despreciar de todos, elige lo más difícil. Se consecuente y fiel hasta el final”.

“Sí, sí –respondo adentro- Haz tú conmigo lo que debas. Yo te seguiré y seré obediente”.

        

         NADA COMPRENDO, nada está claro, ni suceden las cosas como siempre. Cerca de dos meses, en oración continua, y unión siento con Dios, que nunca hasta ahora había sentido. ¿Cómo es esto? Yo no lo sé.



*
Es un día muy significativo, mucho, por la cantidad de sucesos vividos. El mismo día siete, desde las diez o antes, de la noche, ya el Espíritu, me tomaba en Sí, sin dejarme, con inflamamiento grande y ardor que duraba horas, pues a las doce y algo, viendo que esta insistencia era abrumadora pensé que podía tratarse de “llamamiento” y no solo regalo.
 
PUES BIEN, esa noche del ocho, ante la insistencia espiritual, acudí por ver qué quería indicarme. Y un impulso me llevó a escoger de entre los libros que en las proximidades tenía, la Biblia, desechando los demás.

         Me puso en Jn. 9 “El ciego de nacimiento”. Lo leí sin entender absolutamente nada que me hiciera referencia. (Lo leí como siempre he leído la B., mirando lo que se cuenta en sí, y de otros, pero sin verme yo en tales referencias).

         Me fui a la cama, sintiendo la acción del Espíritu deflagrando en mi interior, sin permitir que el sueño llegara. Permanecí así varias horas. En su transcurso, los pálpitos espirituales aceleraron, y el alma entró en vorágine (como oleadas intensísimas, en que parecía querer salirse y expandirse hacia fuera).

         ...Venían a mi mente –sin saber por qué- escenas del evangelio (era visión de escenas del evangelio muy rápidas, como secuencias que pasaran sucesivas mostrándome el hacer de Jesús en su vida pública), en que Cristo actuaba sobre unos y otros: curando, predicando... (todo el pasar de Cristo, sus discusiones con los judíos, enfrentamientos y pasión. No lo escribí en principio, asustada).

         ...Y  en medio de aquella amalgama, oí  una voz en mí, que decía:

            “PASA CUAL PASÉ. HAZ COMO YO HACÍA”

Me asusté mucho. Nadie puede saber qué pánico me invadió, pues pensaba que era mi imaginación febril, la que me dejaba entender aquello, y trataba de no hacer caso, como si no oído, sin conseguirlo, pues la certeza de aquella voz me amedrentaba.
         En medio de aquella confusión, volví a oír de nuevo en mí, algo semejante:

“NO ERES TÚ QUIEN OBRA, QUIEN OBRA SOY YO. TÚ SERÁS TAN SOLO UTENSILIO”

*
El día 2, rezo y pido insistente se sirva darme luz (de convencimiento o de rechazo). En un rato disponible, intento seguir leyendo a S. Pablo (no como búsqueda, que ya he renunciado a buscar por temor de ser yo inductora de estas confusiones, sino como lectura, pues no he leído nunca a S. Pablo, y ahora deseo conocerle).



Intento proseguir por donde me había quedado, y empieza el texto a hablar de “los profetas”. Sigue 1Cor. 14 “ El valor de la profecía”.  Me quedo anonadada por su contenido. Lloro y doy gracias a Dios porque considero que me ha respondido con claridad.



Lo comunico a Juan Pablo II A partir de aquí, ruego a Dios se apiade de mí y me proteja del mundo. El mensaje enviado es el que sigue:



"Porque la condición humana se aparta sustancialmente de los valores del evangelio; porque el hombre y la mujer de esta época viven de espaldas a estas enseñanzas, Dios me manda comunicar, por medio de su Espíritu en Cristo que realicemos reconversión de nuestras vidas, con arreglo a los principios evangélicos que demandan: amor para el prójimo, justicia y misericordia, ejerciendo la caridad y la paz. Que oremos y nos dejemos conducir por un sentido de penitencia profunda que haga posible la reconciliación con Cristo.

Pero si desoímos su mensaje, en breve, muy en breve, tendremos constancia de su enfado. Y nuestras propias culpas servirán al padecimiento que ocasione tal desastre. Por lo mismo me hace anunciar, que si volvemos nuestros ojos a él, e impregnamos nuestros corazones con su Palabra, seremos perdonados pues no desea nuestro daño

´Desde aquí os exhorto por el Espíritu al beneficio de un "Nacimiento Nuevo", en Cristo."

Este mensaje, enviado el 2/2/96 lo mismo que otros siguientes en años sucesivos, fue desestimado y dado al olvido.

                                                            *

Desde su mirada me transmite su Poder, y es de tal naturaleza, que no puede ser  desafiado.

         “En el cuadro te miro, pero tus ojos están sobre mí. No puedo soportar tu mirada. Con un volumen imprevisto, me aplasta, me adormece, me arroba silenciosa y tira de mí, no sé a dónde...
         Hoy tus ojos me miran, sin dejarme mirarlos. Me deslumbran. Hoy tiene una fuerza especial tu mirada, rayos parece que proyecta.

         “Estás como diciéndome (así lo sé entender):
         “Mírame haber si puedes penetrar lo que hay en mi mirada. Lo que yo veo y vosotros, no veis, ni veréis...”

         Y para demostrar que no puedo, apenas trato de permanecer mirándote, me arrobas instantáneo, en modo dulce y tal, que no puedo sustraerme de ello. Me obligas a cerrar los párpados, ante ese modo desbordante y vital que hoy es rayo potente en tus ojos.

         También esta tarde, el corazón me has apretado, hasta arrancarle dolor, de tanto. (Ese dolor que es como de dardo) y lo has apretado en tal modo que creí que podías arrancármelo. (Esto sí lo has hecho otras veces).

         Después de rezar, no sé por qué, esa mirada Tuya, que ejerce hoy algo intimidatorio, me hace mirar en la Biblia. Cierro los ojos aún, sin alzarme, y palpo por algún lugar que se abre. Antes de mirar lo que aparece escrito, te invoco y te vuelvo a mirar a Ti, porque tus ojos hoy tienen una fuerza distinta y misteriosa.

         Me sorprendo con lo que aparece: Amós, y de nuevo las profecías sobre la destrucción de Israel, por sus pecados, por su falta de caridad y su egoísmo: “Visión de las langostas” “La plomada” “La canasta de frutas”  (Am. 6- 8)

         No sé entender (tal vez no quiero entender que entiendo que me avisas de desastres) No lo sé. Pero te ruego de todo corazón que perdones Señor nuestras ofensas y esperes. Espera aún que sepamos comprender. Hay seres inocentes y buenos. Te pido que tengas piedad, si de desastre avisas. Te pido que lo hagas recaer en mi y a ellos los salves.

El Señor desde esa mirada me muestra que contempla nuestro abandono y desvío, razón que resume él mismo, por medio del siguiente oráculo ( T. 1 OT. - 26)


" MIRA LA LUZ DEL AMOR QUE SE VA APAGANDO. YA SE HA ROTO LA FE." 

                                                                    

                                                                  2




Cristo me aproxima a su pasión, me la hace sentir, y al par con ello me conduce hasta la plegaria que unos días antes, había formulado ante Él ante la inminencia de “los desastres anunciados”, ambas situaciones las une, situándome ante Nehemías



         “ Esta tarde, tras rezar, en que me has arrobado todo el tiempo, especialmente en los misterios dolorosos (que narran tu Pasión), consulto la B. y te pido me hagas ver lo que no sé entender.



         Aparece Nehemías 1 “Dolor de Nehemías por la situación de Jerusalén” (Lo resumo): “ El profeta se lamenta del estado en que se hallan los suyos, y se acusa como pecador, él y su familia. Pero a pesar de ello, pide clemencia a Dios para que restituya a su pueblo los bienes que tuvo, la prosperidad y beneficios que prometió a los que le son fieles y le aman”.

atravesado en el corazón del mar. ¿Podrás decir aún: Un dios soy yo, ante los verdugos? Un hombre eres, y no un dios...”


         No sé qué pensar. Dios mío, tú me harás entender. Confío en Ti. (No hace muchos apareció este mismo pasaje: (Ezq. 28) 1 pero no quise tomarlo en consideración, pues nada entendía... Hoy sí lo anoto, dada su insistencia.) 1

         (1)  Me muestra Cristo la situación que en efecto se hallará, y será el desplome de la humanidad pecadora. El fin del reino pecador... El hombre soberbio será abatido, y se encargará de ello otro pueblo feroz, que no tendrá en cuenta sus logros, ni conquistas. Lo aniquilará.
            Así dirá con su Voz, este Oráculo:
“ VAN A SOBRAR TRES. ¿DÓNDE ESTÁN? ¡AQUÍ! ¡AQUÍ! ¡AQUÍ!”
Es referencia a la Santísima Trinidad: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Los Tres Divinos van a sobrar, porque se está declarando nulo, por parte de muchos, todo cuanto ha entregado Jesucristo, y no se ha tenido en cuenta lo que en estos momentos revela, por lo cual falta la FE en su resurrección (el Poder de Jesucristo), en el cumplimiento de sus promesas (designios del Padre), puestos en el Hijo, para el establecimiento del Reino, y en la Verdad (revelación escatológica) que realiza el Espíritu Santo.  ( T. 4 OT – 100)

            Por tal razón, ante este “desastre escatológico”, me tomará a mí, acogiendo mi ofrecimiento.
            Y declara con su voz, el siguiente Oráculo:
            “TENGO QUE ESTAR CORRIGIENDO Y RECTIFICANDO”
Me envía con sus razones, todo cuanto me revela, de modo que los suyos desanden los pasos mal dados y regresen hacia dónde en estos momentos se encuentra.
Porque sólo hay un medio de evitar este fracaso de la humanidad, y es ello, que el hombre recupere la fe, rectifique sus maneras y se arrepienta. Que reconozca la Presencia de Jesucristo y se convierta. ( T. 4 OT – 62)


En aquellos momentos comenzaba el Libro: “Cristo Vive, que no lo crucifique el S. XX”, y me daba cuenta de que “no lo escribía yo, sino que era inducida a escribir por el Espíritu Santo.
"¿Qué quieres que haga? ¿Qué tengo que hacer? dime lo que quieres... Soy tuya. dispón de mi. Haz lo que quieras."
Luego consulté la B. por ver si ahí me indicaba y en efecto me condujo a (Lc. 19,40): "Entrada triunfal en Jerusalén"
Ahí leo como los discípulos le proclaman llenos de fervor y cómo los fariseos les instan a callar y así lo piden a Jesús, el cual advierte:
"Os aseguro que si estos callaran gritarían las piedras."

Me instas a proclamarte; la sensación es muy fuerte (1) tanto que me hace sentirme responsable de los males que acontecen como si llevara sobre mi el peso de las maldades y pecados del mundo.
(1) Repentinamente me hizo sentirme responsable, me hizo contemplar todo el daño que sufrían las personas y las injusticias terribles que padecían, y porque me hallaba contemplándolas yo debía pronunciarme hacia aquellas cosas sin dejar de lado mi responsabilidad salvadora. Aquel conocimiento que se desvelaba resultaba aplastante; era algo que impedfía huir, pues no se podía ya... y obligaba a afrontar la verdad, para desde ella trabajar por todos y rescatarlos.
Este signo de su Poder en mi, revelación por la que me obligaba a "seguirle y obedecerle" a fin de paliar con "sus Nuevas" el desnivel humano que el pecado o el mal, introduce en los hombres, era también señal de "La Venida de Jesucristo". Porque es Cristo Quien se siente responsable de los hombres y comprometido eficazmente a su salvación, sin huída posible.

Era SEÑAL de "La entrada en Jerusalén" que acababa de indicarme, sin que entonces yo lo supiera entender, y sí ahora, tras los sucesos del último año.
Cristo me hizo sentir "Su Segunda Venida", lo que acontecerá en este trayecto OMEGA que yo estoy anunciando. Vendrá como Germen que "todo lo hará fructificar"; que  "pondrá el trigo en el granero y echará la parva al fuego"...
Él siente sobre sí los pecados de los hombres, y acude de nuevo para brindarles su salvación.
Por tal razón dice con su voz, Oráculo del Señor:

" ¡UNA HOJA DE SERVICIOS! ¿ME VOY A PONER APARTE?" 

 (...) Desde su primera venida, Cristo lleva un largo camino recorrido, "una hoja de servicios" incomparable, que nadie puede apartar, y que culmina en lo máximo que es posible... Si bien, inicia ahora el trayecto OMEGA, y comienza a significar todo lo que hace ya para dar cumplimiento a sus promesas y a su "Segunda Venida", pero los tuyos no comprende lo escatológico y consideran erróneamente que todavía no sucederá, o que no será, porque son exageraciones del habla y del entendimiento antiguo.
Por tal motivo, lo que él realiza AHORA no se contempla. ¿Y qué hará Cristo, después de habernos concedido tanto? Les interroga él:
¿ME VOY A PONER APARTE?

Si los hombres en su incredulidad no le autorizan a pasar, ¿tendrá que quedarse de "los hechos y acontecimientos que ya está desarrollando, y es su HOJA DE SERVICIOS, (Lo Omega)? (T. 1 OT. 62)
                                                                * 

Te doy las gracias incansable por tu respuesta ayer. Unida mi voluntad a la Tuya, en todo y por todo, me guía.

" Y hablome el Señor y díjome: Hijo del hombre come tu pan con temblor y bebe el agua con ansiedad y temor. Y dirás al pueblo que está en esta tierra: Así habla el Señor Dios a aquellos que habitan en Jerusalén y en la tierra de Israel: comerán su pan llenos de sobresalto y beberán el agua poseídos de congoja; porque su país tu todo lo que contiene, será devastado. De suerte que las ciudades hoy pobladas, quedarán desiertas y el país hecho un páramo, y conoceréis que yo soy el Señor."
"Hablome el Señor otra vez y díjome: Hijo del hombre, ¿qué refrán es ese que teneis vosotros acerca del país de Israel según el cual dicen: Los días van pasando y las visiones se desvanecen?
Por lo mismo diles: Esto dice el Señor y diles que están para llegar los días en que se cumplirán las visiones. Porque no quedará más sin efecto ninguna visión, ni habrá oráculo engañoso, entre los hijos de Israel. Pues yo soy el Señor hablaré y sucederá cuanto yo dijere, ni se diferirá para más adelante, sino en vuestros días. ¡Oh raza contumaz" Yo hablaré y obraré, dice el Señor."

Prosigue el texto y arremete Dios contra los falsos profetas que amedrentan las almas con mentiras y propugnan una paz inexistente (2)
Me turbo, pues pienso en la profecía del "HAMBRE" y en todos "LOS DESASTRES" que en los otros pasajes me anda anunciando estos días .

(2) En la actualidad el aviso que Ezcequiel transmite, incide en "los falsos profetas", constituídos en "mercaderes del templo y viñadores homicidas"   que hacen caer el Templo del Señor en la ruina y lo desvían con sus modos y proyectos humanos, de los designios que el Señor establece, porque se han vuelto incrédulos. Son "lobos con piel de cordero" que Cristo mismo señala a los verdaderos discípulos, los que le ven, le oyen y le siguen. 
La Iglesia de Cristo habrá de seguirle, desasiéndose de la Iglesia que vive sin Cristo, y ya ha dejado de seguirle.
Dice él con su voz este Oráculo: 

" JUEGAN A DIOS."

Tratan ellos de alzarse por encima de él, y lo apartan. Le desobedecen con el pretexto de resultarles increíble lo que escuchan, sin hacerse ningún planteamiento que pueda dejar pasar a Cristo a su Templo. Y los hay que conocen que en efecto Cristo está delante de ellos en esta manifestación que les comunico , pero como aquellos "Viñadores homicidas" prefieren matarlo de nuevo, para quedarse a su arbitrio con el manejo de la Viña (L. 1 - 11)
Y añade todavía el Oráculo:

“LOS QUE ESTÁN MARAVILLOSAMENTE SENTADOS.”



            Los que quedaron en ser sus testigos, sus servidores, pero se han acomodado en sus sillones, y ya no desean establecer nada que se oponga al sentir del mundo. La jerarquía eclesial está tomada por ellos. Destruyen cualquier iniciativa del Espíritu, y dejan a Jesucristo apartado como lo que sucedió, pero ya “está superado y todos salvados, sin necesidad de hacer otra cosa, que entregarse a las cosas y seres de la tierra”. Han persuadido a los fieles de una bonanza inexistente, de una paz que NADA  asegura, ni promete, y de un amor ficticio, hipócrita, que pronuncian constantemente con sus labios, en tanto rechazan el amor de Jesucristo que se manifiesta ahora.
EL SEÑOR INSTA A LOS SUYOS A QUE LO ESCUCHEN

De Juan Pablo II me dijo:

“SE ASUSTA MUCHO MÁS. MUCHO ”



            De Benedicto XVI, me ha dicho muchas más cosas, algunas de ellas figuran en los escritos que acompañan. A finales de 2009, me dice de él:



“EL PAPA GUARDA ESTA REVELACIÓN SIN SACARLA, PERO ES LA HORA DE LA VERDAD. YA NO QUEDA MÁS TIEMPO. SU PODER ESTÁ CONTADO, MEDIDO Y TASADO. NO SE DEMORARÁ EL ESTALLIDO DE LA LUZ. LOS QUE QUIERAN ACOGERSE A ELLA QUE VENGAN QUE SE APROXIMEN ENSEGUIDA Y NO TARDEN. LOS QUE QUIERAN PERMANECER EN LAS TINIEBLAS AHÍ ESTARÁN Y ESE SERÁ YA SU ÁMBITO.”
 

De la Iglesia dice:



“LA OTRA CON LOS PAPELES PERO NO SE ENTERA”.



Muchos han sido los avisos y nulas las respuestas. En ello han discurrido casi dos décadas en las pudiera haberse realizado mucha labor, que habrá de ser comenzada en medio de la pérdida. Sé que estas no son todas las personas que integran la Iglesia, pero sí forman una porción importante, tanto como para generalizar el poco interés que la Iglesia muestra por el Señor y por lo que ahora hace. En tal modo, que ante la falta de disposición a vincularse, dice él mismo con su voz, Palabra del Señor:


“¿NO HAY NADIE? ¿ESTÁ TODO CERRADO Y TODOS MUERTOS?  LOS HIJOS DEL REINO, ¿DÓNDE ESTÁN?”
 
Procedo a insertar algunas de las consideraciones que han sido formuladas a estos tres Papas, en los sucesivos escritos enviados al Vaticano, con el fin de que entiendan la Presencia del Señor manifestada, y se dispongan a ella, pues son los conductores del rebaño. Ellos, tienen la misión de apacentarlo, es decir: han de conducirlo por sendas de paz, de amparo, sin angustias, y ello sólo pueden realizarlo de una manera: vinculándose a JESUCRISTO Y A SU HACER.
He descrito los avisos que él me da, para estos tiempos, por los cuales conviene que estén todos atentos y preparados, con las aceiteras llenas, para cuando él venga, sin bien puede suceder -y es lo que sucede- que el rebaño sea apacentado bajo una falsa paz, una falsa filosofía emanada de la arrogancia de quienes se han convertido en dueños de la Viña, pero no lo son. 
Ahora que Cristo señala ya su Venida, la Iglesia jerarca rechaza entender su MENSAJE, y no se da por aludida, ni quiere creerlo. De este modo, conduce a los hijos del reino hacia la perdición, por desacato a Jesucristo y rechazo a cuanto está diciendo él.
Los textos que introduzco serán fragmentos, con el fin de lo alargarme demasiado. Veamos:
26 de abril  de  1998 
A la atención de J. P. II:    
 


            Procedo a escribirle de nuevo, para enviarle y poner en su conocimiento,  los motivos por  los que he acudido con mis instancias a S.S., durante este tiempo.

           En la carpeta que le envío, incluyo tres cuadernos originales, fotocopiados (con muy mala calidad, por lo  que le pido excusas), que corresponden tal después se explica, a los apuntes  de las experiencias vividas desde hace casi tres años, que S.S. desconoce, pues nunca en verdad se las he mencionado. Y ahora lo que le envío no es sino una compilación resumida de ellas, a fin de que pueda comprender mejor, todo cuanto con anterioridad le he comunicado y enviado.

           Así mismo, le envío un informe, detallando en él, mi actividad espiritual desde que todo comenzó, hasta el presente, con inclusión de algunas de las experiencias vividas.

           Espero  y deseo que todo esto le dé razón de cuanto he venido manifestándole, y pueda rendirse cumplimiento a la Voluntad que así lo demanda.

RESPECTO A ELLO: Incomprensible resultaba para mi, que la Iglesia (su Pontífice) no reaccionara al llamamiento del Señor. Pensaba que era el desconocimiento de las vivencias, lo que podía hacerle recelar, y quiso el Señor que le enviara UN INFORME DE EXPERIENCIAS (Informe I), en donde daba cumplida información de lo sucedido en mi vida a partir del 20 de noviembre de 1995 y con posterioridad a lo largo de 1996.
Ahí estaban detalladas situaciones preciosas y todos los modos que el Espíritu se servía concederme.
Al par con ello, quise enviarle unas fotocopias de los Apuntes originales manuscristos, de los primeros momentos de manifestarme a mi su PRESENCIA, pues en ellos se veía con mayor claridad lo que Él estaba realizando tomándome consigo.
Tampoco esta vez hubo respuesta. Mi voz parecía caer al vacío, pero lo que me inquietaba era que ese vacío era cuanto el Señor estaba recibiendo.

                      INFORME II

*** AVISOS YA CUMPLIDOS ***

(Libro Tercero I, de Revelación y Exhortación a la penitencia)





Estos avisos fueron comunicados durante el año 96, por medio de cartas. Escritos en el libro que se cita, con anterioridad al dieciocho de mayo de 1997, fecha en que se concluyó y comenzó a darse a conocer. Todavía no se percibían los sucesos que aquí se describen.
HAMBRE: Páginas. 19, 21, 24, 44, 45, 46, 78.

* Página 19
Hubo un tiempo pasado, en que la Tierra, en algunos lugares sintió hambre...
Tiempos de daño, de pobreza, en que la paz quebró. (...)
         Solo algunos entendieron mi aviso
            Ellos dieron comida a los hambrientos.
* Página 20
         ... Como en aquel momento
            ya olvidado, que la miseria se extendió incesante,
            pronto veréis el hambre paseando su caballo.
            Se extenderá su rastro de indigencia,
            habrá enfermedades y desastres...
            El niño llorará desamparado;
            los que ahora se cubren de abundancias
            caerán bajo el garfio de la muerte.
            Sabrán qué cosa es pasar fatigas...
            Mas no quiero dañar al que me oye,
            avisa pues a los que dicen que son míos...
            Diles que guarden y almacenen cosas
para tener después como reserva
            pues habrán de ejercer la caridad. “

* Página 21

            “ Mejor haced acopio de alimentos

              y avisad a los miembros de mi iglesia* Páginas 44 y 45

         El hambre aguarda rondando las esquinas

            Con sus largos colmillos preparados.

            No queda mucho tiempo...
            El alimento se pudre si se guarda... Mejor haréis acopio
de dinero, para comprar las cosas necesarias
cuando el caballo de la hambruna se desboque...
Atended a mis pobres y asistidlos... Guardad
Para ese fin, guardad dinero. Yo, el Señor
Antes de que suceda, te lo he dicho”. 

COMENTARIO:
- Se habla del hambre que se extenderá por diversos lugares de la tierra. Hambre grande, miseria.
- Así es. La hemos visto agravarse en las zonas donde es endémica y que son deficitarias siempre, pero también la hemos visto aparecer en zonas nuevas, por motivos diversos: cambios políticos o sociales, cambios climáticos, desastres naturales en general, o guerras...
- Esta es una información somera y no puntual, que da una aproximación. Por eso nombro sólo los países, en donde más parece haberse significado esta calamidad, en el período del que hablamos. Y son, (según las noticias de los medios informativos): Rusia y los Balcanes (Europa), Pakistán
     India, Indochina, Tailandia, Corea, China (Asia); Ruanda, Zaire, Sudán, Angola (Africa), Cuba, Honduras, Nicaragua, Colombia, Bolivia (América del Sur y Centro).
- Se habla también de la extensión de “su rastro de indigencia”  y de que habrá “enfermedades y desastres” ; el niño llorará desamparado”... En efecto hemos visto avanzar este rastro de pobreza mayor ahora, que hace tres años, en los puntos descritos, por razones que tienen que ver con desastres, inundaciones, huracanes, terremotos, tormentas, guerras... A veces el desastre ha sobrevenido como consecuencia del hambre, enfermedades (disentería, cólera, malaria, fiebres tifoideas, tuberculosis...) o al contrario, tras la catástrofe natural o humana, el hambre y la enfermedad... También hemos visto a
muchos niños huérfanos y desamparados, como consecuencia de estos avatares ( Mitch, éxodos, campos de refugiados...).
- Hay avisos para los considerados “ricos” “los que ahora se cubren de abundancias”  hallarán muerte...; pasarán fatigas. Cierto es que hemos visto cómo en los países ricos del Centro de Europa, muchos turistas y residentes, han muerto en desastres recientes, como los aludes de nieve, sucedido en Francia, Suiza y Austria. O el trágico accidente del túnel de Montblanc en Francia, aún más reciente... Y también lo es, que la guerra que actualmente tiene lugar en los Balcanes (Servia y Albano-Kosovares, OTAN), ha hecho cambiar la suerte de los que vivían bien, o no carecían y ahora pasan fatigas, estén en el bando que estén...
* Página 46
¡Oh todos, todos, escuchadme! . Los que a Dios
proclamáis, llamándoos “Príncipes”.
Ved lo que Dios prepara a los incrédulos...
Atended su mensaje y preparad una bolsa de amor
Que en los días del desastre, sirva para asistir al desnutrido
Antes de que suceda, yo os lo digo.

      * Página 78
 Mas hora es de guardar, antes que falte.
 Herido está el Amor, y ya no acepta
 Más treguas donde reina la barbarie.
 Así, escuchad su aviso, pues se acerca
 La bacanal de los espectros: viene el hambre...
COMENTARIO:

- Se solicita que haya un llamamiento, y una convocatoria a la conversión, con práctica de la caridad. Tal llamamiento está realizado.
- Se avisa del enfado del Señor y de su hastío ante nuestra barbarie, de sus amenazas para los que no creen o se niegan a aceptarle. Estos avisos se han realizado muchas veces.
- Se solicita que se dé aviso a su iglesia, a los suyos... La iglesia ha sido avisada, desde el inicio de la revelación (1996).
- Se indica la necesidad de guardar dinero, mejor incluso que alimentos, los cuales se estropean, para socorrer a los necesitados... Cierto que hemos
visto, cómo en medio de las catástrofes sucedidas, ha habido que reconstruir países y zonas extensas devastadas ... Y ello, sólo puede hacerse con aportaciones económicas. Ha sido necesario recaudar fondos cuantiosos, para invertirlos tal se solicita. ¿Podía yo conocer dos años antes esta necesidad?.
- Se notifica además, el llamamiento que Cristo hace de la conversión y el arrepentimiento. Si se atiende esta llamada, nada sucederá. Él lo afirma. Pero no es atendido. Y por eso todo se cumple.

DESASTRES O DAÑOS: pags. 21, 24, 68, 69, 70, 72, 74 y 87.

* Página 21
“Dirás que Yo te mando; que el desastre amenaza,
y la tormenta. Que el mar quiere salirse de su orilla.
Que la era de paz no se sustenta.
Y sobre todo diles que oigan, si saben escuchar
el grito que subyace en la miseria."

* Página 24
“Mas no sólo el hambre hará estragos;
otros males vendrán sobre la tierra”.

COMENTARIO:

- En ese mismo orden que se indica escrito, en la referida pág. 21, del libro Tercero I, comienzan a sucederse uno tras otro, desastres cuantiosos, durante la primavera, el verano, el otoño del 97 y durante el 98, y lo que llevamos de 99.
- Dice: “el desastre amenaza y la tormenta “, recuerdo primero, un fuerte terremoto en Irán; y poco después, comienzan a producirse inundaciones, producidas por tormentas con lluvias torrenciales en diversos países de Europa, en el Centro; Polonia, y los limítrofes. Alemania, Francia y Holanda, la cual se vio obligada a reforzar los diques de contención para evitar la entrada del mar. En muchos puntos, entró y causó inundaciones grandísimas. Así aquello: “el mar quiere salirse de su orilla ” sin contar con otros medios de salirse, como el maremoto que hubo en Oceanía, con más de 6.000 víctimas, algún tiempo después. Dice también: “ que la era de paz no se sustenta “ y así es. En efecto: conflictos como el de Bosnia, Pakistán, Angola, Sudán, Ruanda... y entre EEUU. e Irak, entre otros... “que oigan, si saben escuchar, el grito que subyace en la miseria “. Cierto, empieza a irse extendiendo por muchos puntos, por unos motivos u otros, la hambruna, la escasez, la miseria o pobreza, con el siguiente rastro de enfermedades y deterioros humanos. Esto a lo largo del 97, 98 y 99. Países del sur de Asia, que no habían tenido problemas económicos y de escasez, empiezan a tenerlos. Así Thailandia, Indochina, Korea, la propia China. En unos se producen además cuantiosas inundaciones, en tanto en otros, se dan al par, sequías persistentes.
- Se producen por entonces éxodos masivos de las zonas de Ruanda, por las luchas étnicas (Hutus y Tussis); campos de refugiados, en Sudán, con multitud de familias rotas, niños perdidos o huérfanos, sin contar con sequías e inundaciones que también se producen.
- Tienen lugar en otros puntos del planeta, olas de calor terribles: en Australia se alanzan más de 40º, y se producen incendios duraderos, difíciles de controlar. Hay inundaciones generalizadas por vastas zonas del planeta: Europa, Sur de Asia, en la India... En las costas de EEUU. y América Central, tormentas tropicales, alternando con: tornados, ciclones o huracanes. (Esto en Asia y la India, también...)

* Página 68
“ El reguero de sangre que sus pasos va dejando por todos los senderos de la tierra, me fuerzan a intervenir, lleno de encono “.

COMENTARIO:

- Cristo avisa de que su intervención –pues la hay- es por causa de nuestras acciones. Se ve forzado a intervenir, pues no hacemos esfuerzo por modificar nuestros esquemas, ni estructuras. Nos dejamos llevar en inercia suicida, por fuera de sus propios planes de “Vida”, ya trazados en su evangelio.

* Páginas 69, 70
“ Ante tus ojos mira pasar el daño que mi mano siembra (...) Mira cómo caen sus obras; esas que tanto esplendor les daban (...)

Todo será sepultado por el fango; las fauces de la tierra se abrirán y se hundirán del todo los edificios portentosos (...) No brotarán los frutos de mi tierra. Todo se agostará (...) La tierra será hostil y no producirá nada y las nubes pasarán de largo; no caerá ni una gota. Los ríos, los océanos, los mares se saldrán de su cauce, sin hallar la salida... mi fuerza sembrará la tempestad en torno (...) Todo alimento será saqueado, consumido. Después vendrá la escasez.

COMENTARIO:

- Dice el texto del libro, “ante tus ojos mira pasar el daño que mi mano siembra...” Y lo he ido viendo, en efecto, como todos lo hemos visto, en los noticiarios y periódicos de cada día, a lo largo de meses y años. Sólo que yo creo y proclamo, lo que Cristo “dice y hace”, en tanto otros, tratan de desconectar “el hacer de Cristo” con lo que está sucediendo, y lo ven ... en incrédulo modo. Continúa avisando de “cómo caen sus obras...”, (las humanas). Y ciertamente, a lo largo de este tiempo, cuantiosos accidentes, con desplomamientos de puentes, carreteras, aviones, trenes y barcos, sin contar los de tráfico (colisiones gigantescas en serie), hemos visto sucederse.
- Añade: “todo será sepultado por el fango “, y lamentablemente, también lo hemos visto: en una localidad de Italia y en algunas zonas de Latinoamérica, como Colombia (una aldea de apenas doce chabolas), sin dejar de connotar cómo los campos de cultivo, granjas y zonas extensas que han padecido inundaciones, quedan convertidas en lodazal. Así, como corrimientos de tierra, y de montañas, por esta causa. Puntualiza: “las fauces de la tierra se abrirán y se hundirán del todo los edificios portentosos”. Se han desplomado, en muchos lugares, edificios, y lo hemos visto, por haber cedido el terreno; por causas diversas. La tierra se ha abierto, bien por lluvias o terremotos, en muchos modos, causando daños.
- Explica también que la tierra no dará frutos... Y hemos visto sucederse en numerosos puntos del planeta, sequías terribles. Sudamérica, Asia (sur) o Africa. Algunas consideradas  como las peores del siglo. Por el contrario en otros puntos y zonas, a veces en un mismo país: “los ríos, los océanos, los mares, se saldrán de su cauce...” .Persiste  la amenaza  de inundaciones severas y entradas del mar a tierra... Lo hemos visto, con las inundaciones que se han producido en tantísimos sitios de Europa, Australia, América del Sur (Bolivia, Colombia, Venezuela, Nicaragua, Honduras),América del Norte, en Cuba, Florida, Miami, Holanda y Oceanía, hemos visto al mar a salirse de su orilla... Unas veces a instancias de los huracanes (Georges, por ejemplo y otros...), otras (Holanda y Oceanía), por tormentas o maremotos. En Asia (China, Filipinas... India, en Bangladesh) por tifones y tormentas tropicales... inundaciones fortísimas.
- Dice: “Mi fuerza sembrará la tempestad en torno”. Una tempestad, provocada por la fuerza terrible de Dios, es la que hemos visto reflejarse en los devastadores vientos que han estado soplando, en forma de: tornados, ciclones, tifones y huracanes... Los de peor recuerdo, por el daño ocasionado el “Georges” y “Mitch”, que arrasaron las costas de Florida, Miami, Cuba, El Salvador, y los países de Centroamérica (Honduras y Nicaragua).
- Avisa de otro daño: “todo alimento será saqueado, consumido. Después vendrá la escasez” Aunque las ONGS se han dispuesto a la ayuda en todos los lugares en que se han padecido desastres aparatosos, los saqueos de alimentos se han producido también, en las zonas deficitarias: en Rusia los controlan mafias, en Colombia también y el vandalismo callejero, provocaba el caos en el reparto. Cuando el terremoto de Antioquía. En Sudán y Ruanda, el ejército roba los alimentos que los países de Europa envían a través de Cruz Roja o de la ONU, sin dejar que el pueblo pueda tener acceso a ellos. A veces se pudren, almacenados (son “consumidos en sí”), por falta de medios para proceder al reparto.
* Página 70
“No han sabido más que desarrollar y emprender la guerra. Ni un solo instante mi grito de paz les ha empapado (...). ¿Cómo evitarán que sus propias obras los alcancen destruyéndolos?.
Les daré a manos llenas, como ellos me han dado... Colmaré sus medidas, con las que ellos colmaban el hambre de los míos... Pues yo dije: todos sois iguales. Mi padre es vuestro Padre. Amaos con mi amor, hermanos todos”. Pero nunca quisieron aprenderlo, ni tan siquiera lo escucharon... Por eso en la noche, arroparé sus miedos con el vacío ensordecedor, que tan graciosamente prodigan. Sus obras lloverán, empapándoles de confusión e ineficacia, ya que mi amor resisten. El Norte será el Sur. No habrá paz ni concierto. Todo será ruina...”

COMENTARIO:
- Desde aquí, contemplamos la guerra. El texto hace referencia al afán belicoso del hombre, que dedica su esfuerzo y su riqueza, su potencial y su desarrollo tecnológico a la fabricación de artefactos bélicos. Aunque este afán es compartido por todos los países sean más ricos o pobres, lo cierto es que los que disfrutan de los mejores arsenales, y armamentos son los países denominados “ricos” o del “Hemisferio Norte”. Por esta razón es a ellos “ricos” a los que “les dará a manos llenas”, les va “a colmar sus medidas”, dándoles tanto de lo mismo, como daban a los hambrientos, que Cristo considera “suyos”, “ sus pobres”... (Referencia válida para el Tercer Mundo o países considerados “pobres”, del Hemisferio Sur), Así dice: “con las que ellos colmaban el hambre de los míos”). Y avisa de las razones de su enfado, pues Él desea que todos los hombres y todos los pueblos se sientan hermanos y sepan confraternizar (la guerra es la antihermandad). Y lamenta: “pero nunca quisieron aprenderlo”. “ni tan siquiera lo escucharon”...
- Veamos pues, que se habla de, daño o desastre, de tipo bélico, por causa de las obras que construye el hombre para realizar la guerra. Un daño que asolará al H. Norte, a los países “ricos”. Países que no han querido tratarse como hermanos, ni nunca han querido aprenderlo... He aquí Yugoslavia: mosaico de países de distintas etnias, que siempre han rivalizado, y por ello, se hallan en guerra en la actualidad. Servios y Albano Kosovares, OTAN... Anteriormente fueron Bosnia y Croacia... En general, la zona de los Balcanes, representa para Europa uno de  los focos más inestables y dañinos, pues de allí surgió la Primera Guerra Mundial y la Segunda. Nunca han escuchado tampoco los llamamientos a mantener la paz y a confraternizar, mantenido pugnas frecuentes.

- Cuando dice: “Por eso, en la noche arroparé sus miedos con el vacío ensordecedor, que tan graciosamente prodigan”, no podemos pensar más que en lo único que aterra a las personas, y les hace esconderse o buscar parapeto: “refugio”, dejando vacía y desolada la ciudad, en tanto se oye, no silencio (que fuera lo lógico, si no hay nada), sino un ruido atronador... si además, dice que son los hombres los que se dan a sí mismos, estos espantos (se los prodigan a sí). Lo único que puede dar lugar a esta situación espantosa es “un bombardeo”. Pues precisamente estos días estamos viendo todos cómo se sucede de modo continuo y espeluznante, sobre Servia, con los sofisticados aparatos “OTAN” (no obstante esto está escrito dos años antes).

- Cuando afirma: “sus obras lloverán, empapándoles de confusión e ineficacia...”, vemos que en efecto esas obras que llueven, son “bombas”, pues cierto que todo lo impregnan de confusión, y cierto que contra su impacto y su poder destructivo, no se puede hacer nada: por ello “la ineficacia”... También por desgracia, las vemos en medio del paisaje desolador que está ocasionado este conflicto . Así, pues todo lo descrito está sucediendo.

- Pero aún concreta el texto, con referencia al mismo asunto: “El Norte será el Sur”, con lo que significa que al igual que lo sucedido en el Hemisferio Sur, con los “pobres” del Tercer Mundo, sucederá a los del Hemisferio Norte, con lo cual, se parecerá tanto en su situación, que cual si ambos transmutaran, el Norte, será Sur. Lo que llevamos visto del Sur es: miseria, hambre, odios, luchas étnicas también... éxodos terribles, separación de familias, niños abandonados y huérfanos, campos de refugiados, epidemias y muerte. Pensemos en la situación por la que están atravesando los miles y miles de refugiados y deportados Albano-Kosovares, y la miseria, el abandono, las pérdidas que les asolan, el sufrimiento que están padeciendo, en esta guerra que aún no termina... y veremos de decir que en efecto, el Norte, es ahora el Sur.

- Y al menos, tal se indica, por ahora, no hay acuerdo alguno: “No habrá paz ni concierto”. “Todo será ruina”. Lo está siendo, verdadera ruina humana, social, material, pues la guerra es siempre la antisolución, es decir: el fracaso del hombre, como hombre. Y aún no termina...



* Páginas 70, 72 y 74


“¡No más mutaciones genéticas, ni experimentaciones biológicas!. Ya no permitiré la manipulación inconsciente a la obra de Dios”.

“Mi mensaje no oyen; de mi Voz se retiran: hambre, desolación, terremotos, fatigas, guerras y salvajismos, tendrán, que generan locura”.

“Por ello enviaré azotes y desastres (...) hacinaré ante países y naciones montañas de cadáveres (...) Yo, el Señor, los destruiré”.

COMENTARIO: (...)

- Cristo insiste incansable, repitiendo que lo que sucede es consecuencia de nuestros actos. Así, por hallarnos de espaldas  a Quien nos convoca a seguir su evangelio, hallaremos daño. Cierto es que estamos padeciendo todos esos daños y salvajismos que se describen, y que parecen locuras, o hacen entender que la humanidad pierde el juicio. Conflictos como los de Sierra Leona, Colombia, Irak, Pakistán, Sudán, Ruanda, Angola, Bosnia, Servia... Manifestaciones o actos vandálicos como manifestaciones con heridos y violencia. Kurdos, atentados del Ira o de Eta. Situaciones permanentes de inseguridad ciudadana en Brasil, Colombia, Irlanda, España (P. Vasco), Argelia, y zonas del integrismo...

- Dice el texto: “hacinaré ante países y naciones montañas de cadáveres...” Y también es cierto que hemos visto pasar en tránsito continuo, un reguero de muertes, coincidiendo con cuanto aquí se describe de lamentable. ¿Cuántas víctimas, a lo largo de este período que se describe y que coincide con el mismo en que Cristo insiste en que realicemos esta conversión que demanda?. No parece exagerado lo de “montañas de cadáveres”. Que cada país, recoja los suyos... y medite seriamente.


INCREDULIDAD: Pags. 17, 45, 87,89

* Página 17

“Ellos sabrán que fueron advertidos”.

* Página 45

“Pero sabrán que fueron advertidos”.

* Página 87

“Yo dije: Creed en Mí, todo cuento proclamo ha de cumplirse. Lo hice, pero no creyeron”.

* Página 89


“Hazles saber, pues los conozco y sé que imaginan, que todo esto no sucederá todavía, que cuanto estoy avisando será dicho y hecho. No se refiere al futuro lejano, como algunos piensan “.

COMENTARIO:

- Todo cuanto se ha revelado, ha sido avisado con anterioridad a los sucesos. También se ha informado, de los sucesos coincidentes con la revelación hecha, a los mismos que ya conocían este revelación.

- Todo cuanto se revela está esperando su cumplimiento. De hecho estos anuncios y avisos que aquí se señalan, han sucedido ya. Pues “serán dichos y hechos”. Los no sucedidos, tampoco pertenecen al futuro lejano.

- Las numerosas veces que me he dirigido para informar de cuanto ocurre y no se me ha respondido, confirman el aviso que aparece: (Itálica) “Yo dije: Creed en Mí, todo cuento proclamo ha de cumplirse”. Lo hice, pero no creyeron”
ESTE INFORME SE CONCLUYE EN ABRIL, DE 1999
                                                 
                                                    *

Lo que  estoy describiendo, procede del Libro que ya había enviado, denominado:

CRISTO VIVE, QUE NO LO CRUCIFIQUE EL S. XX”. Su parte Tercera: “Libro de REVELACIÓN Y EXHORTACIÓN A LA PENITENCIA”,  contiene los mensajes primeros que el Señor me concedió, sobre “HAMBRE”  y “DESASTRES”  que me hizo avisar al Papa.

                En ellos, hay una constante: su Voluntad a perdonarnos si cambiamos de actitud. Porque de no hacerlo, somos nosotros los que nos orientamos a la pérdida de todo lo que él ha tratado de construir.
                Lo que él ha tratado es de mostrar las fauces del monstruo terrible que está acechándonos, para cuya percepción ha consentido que la Iglesia contemple la desolación en diversos modos y lugares, de modo que le sirva de advertencia, y para que se vuelva al Señor arrepentida, y consienta rectificar su deriva. Pues, forma parte de ese DESASTRE, la ruina del Templo (Ver CARTA-INFORME, 2010), y la entrada de los últimos cumplimientos que él mismo declara en su Discurso Escatológico, y en los profetas, como Daniel, Zacarías y el Apocalipsis.

A tal efecto me muestra (Libro V de ORÁCULOS: CARTA-RESUMEN):

Dice el Señor:
                                “ CUANDO OIGAS LO QUE TE DIGO, ELÍAS...”
Me explicas que Tú eres, por tu Espíritu, quien me dice esto (Jn. 7, 37-38).
Pones la referencia en LA EUCARISTÍA NUEVA que estás HOY consagrando.
Porque pones en ella otra vez, actualizada toda tu angustia en Getsemaní, todos tus sufrimientos, por amarnos, los latigazos fieros, las espinas, el baldón de la cruz, las terribles heridas que te clavaron...
(…)
Dice el Señor:
                                                          “ VOY A METER...”
Me muestras el amor que sientes por mí (Lc. 9,1-48). Esto es lo que dejaste inconcluso el otro día, al decirme:
“CUANDO OIGAS LO QUE TE DIGO, ELÍAS...”

Porque estás dando cumplimiento a lo dicho por el profeta: (Mal. 3, 23-24), pero siendo que pones Tú en marcha todos tus recursos últimos, que estaban dichos y escritos, esta Iglesia, permanece sorda, inmóvil, ciega, muda...  (...)

...Tendrían que cambiar, dejar de lado “sus mercaderías”, y sus lugares ostentosos y vanos, para hacerse humildes. NO QUIEREN.
...Tendrían que dejar su fama, sus glorias terrenas, para adquirir lo que Cristo HOY les enseña y es doctrina, vida inserta al evangelio, que se actualiza, en COMUNIÓN NUEVA.


(El Señor me pone delante una VISIÓN, que describo:  “Veo como una especie de huracán fortísimo, que todo lo arranca de cuajo, y pone destrucción en todo. Por doquier aparece daño. Parece que todo lo creado, las criaturas, todo... sea como reabsorbido. Como que los cielos se enrollasen repentinos, desarraigándolo todo, todo desgajándolo, arrasando a su paso cuanto encuentra, haciendo desparecer la creación entera. VEO LA DISOLUCIÓN DE LO CREADO. Parece como contemplar un video al revés, de manera que todo lo que se ha estado contemplando, se deshace a nuestros ojos, yendo hacia atrás, hacia la NADA. Me siento muy impactada. Es terrible.)
(...)    Cristo, prosigue siendo ignorado, olvidado, sin posibilidad alguna. Pero además, sin ESPERANZA, porque si es cierto que los enemigos se hallan, también lo es que “los que hubieran de ser amigos, se han acomodado, sin querer defender a Jesucristo, sin alzarle, sin querer ENTENDERLE en lo que desde mí les explica, sin querer acoger la dificultad de proclamar ESTAS NUEVAS, porque en ello tendrían que romper demasiados esquemas, y exponer sus nombres, su fama, sus cosas... ¡No vale la pena! Mejor es seguir como están...
(...)         La impasibilidad es TANTA... que desestiman la SALVACIÓN que Cristo pone en marcha, único carril que los haga retornar y convertirse...
En ello, su falta de fe, se equipara a la de los inicuos e incrédulos. Y si después de tantos años, de intentar LLEGAR  hasta ellos, CON TODA CLASE  de OFERTAS, Cristo  
 
 
 









 

               
           





 

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